NATACIÓN TERAPÉUTICA
La natación es un deporte muy completo, que requiere un aporte constante de oxígeno. La capacidad pulmonar se fortalece mediante su práctica. También es una actividad terapéutica en algunos casos de problemas asmáticos. Asimismo, la humedad de la piscina favorece la expulsión de mucosidades.
La natación mejora el sistema cardio-torácico. El corazón se fortalece por el estímulo de la circulación sanguínea. Otro beneficio sustancial de la natación es la mejora del tono muscular. El cuerpo sumergido en el agua presenta una mayor resistencia en sus movimientos que en el aire, por lo que se fortalece la musculatura y se flexibilizan las articulaciones. Además, el riesgo de lesiones articulares es menor que en el suelo debido a la falta de gravedad en el agua, donde cualquier impacto es menor. Quienes practican la natación, o cualquier otra actividad desarrollada en el entorno líquido, adquieren una buena corrección postural gracias al ejercicio controlado. Es un deporte a menudo recomendado por los terapeutas para apaliar dolencias de espalda.
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